Reproduciendo por enésima vez un recopilatorio de los Ramones que tengo por casa, una de las pistas, que hasta ahora me había pasado desapercibida, atrapa toda mi atención. La Mosrite de Johnny, con su cálida distorsión, comienza con un rítmico riff cuyas progresiones culminan en potentes y largos Mi, para pasar después a la base del ritmo: La-Fa-Sol. Por su parte Joey exige las ondas, directamente y con arrogancia.
Técnicamente a mi entender, la canción se aleja un poco del clásico sonido Ramones, incorporando riffs y efectos. Intrigado busqué información. Esta canción forma parte del álbum Pleasant Dreams, editado en 1981. Y, efectivamente, en dicho trabajo los Ramones parecen incluir elementos del hard rock y del pop. El propio Johnny declaró no estar muy contento del resultado final del disco. De hecho no le gustaba la canción, y consideraba que el single de apertura debió ser The KKK Took my Baby Away, mucho más acorde con el estilo tradicional de los Ramones. A pesar de la opinión de Johnny, la canción me parece muy buena. El sonido es contundente. La letra refleja la amargura que arrastraron durante su carrera por la falta de reconocimiento y éxito. Eran buenos, lo sabían, hacían rock y tenían legión de seguidores en todo el mundo. Habían sido los reyes del underground en New York, pero no obtuvieron el reconocimiento de la industria. Los medios de comunicación no les ofrecían el lugar al que aspiraban y se sentían maltratados por el sistema. Según su biografía (Commando: Autobiografía de Johnny Ramone; Malpaso, 2012) Johnny se dió cuenta que no llegarían a ser la gran banda que anhelaba cuando no consiguieron un éxito con End of the Century, por lo que decidió no agobiarse más. Se dió cuenta que en USA el punk-rock no interesaba a la industria musical, a diferencia de UK, por lo que según sus palabras "era una situación en la que era imposible ganar". Se dio cuenta de que las bandas que conseguían una buena promoción eran las que podían triunfar, independientemente de su calidad o del trabajo dedicado. En sus inicios pensaba que los Ramones llegarían a convertirse en una de las mayores bandas, al estilo de los Beatles o de los Rolling Stones. Como dice la canción (letra de Joey Ramone):
Técnicamente a mi entender, la canción se aleja un poco del clásico sonido Ramones, incorporando riffs y efectos. Intrigado busqué información. Esta canción forma parte del álbum Pleasant Dreams, editado en 1981. Y, efectivamente, en dicho trabajo los Ramones parecen incluir elementos del hard rock y del pop. El propio Johnny declaró no estar muy contento del resultado final del disco. De hecho no le gustaba la canción, y consideraba que el single de apertura debió ser The KKK Took my Baby Away, mucho más acorde con el estilo tradicional de los Ramones. A pesar de la opinión de Johnny, la canción me parece muy buena. El sonido es contundente. La letra refleja la amargura que arrastraron durante su carrera por la falta de reconocimiento y éxito. Eran buenos, lo sabían, hacían rock y tenían legión de seguidores en todo el mundo. Habían sido los reyes del underground en New York, pero no obtuvieron el reconocimiento de la industria. Los medios de comunicación no les ofrecían el lugar al que aspiraban y se sentían maltratados por el sistema. Según su biografía (Commando: Autobiografía de Johnny Ramone; Malpaso, 2012) Johnny se dió cuenta que no llegarían a ser la gran banda que anhelaba cuando no consiguieron un éxito con End of the Century, por lo que decidió no agobiarse más. Se dió cuenta que en USA el punk-rock no interesaba a la industria musical, a diferencia de UK, por lo que según sus palabras "era una situación en la que era imposible ganar". Se dio cuenta de que las bandas que conseguían una buena promoción eran las que podían triunfar, independientemente de su calidad o del trabajo dedicado. En sus inicios pensaba que los Ramones llegarían a convertirse en una de las mayores bandas, al estilo de los Beatles o de los Rolling Stones. Como dice la canción (letra de Joey Ramone):
Queremos el mundo, y lo queremos ahora, vamos a tomarlo, como sea.No sé que pensará el lector, pero yo creo que Johnny se equivocó, que su desilusión era un demonio de su propia mente. Pocos comparten (y compartirán) la gloria y el sitio reservado a los Ramones en el Olimpo del Rock.
Queremos las ondas, si el rock va a sobrevivir.
¿Donde están tu coraje y tu afán de supervivencia?
¿No quieres mantener el rock vivo?
Señor programador, tengo mi martillo para destrozar mi radio.
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